2021 será el año de la colaboración entre la empresa y la sociedad. La Fundación SERES así lo cree. Desde la institución se ha apuntado que 2020 ha sido el año de la “interconexión” entre empresa y y sociedad, por lo que este año será el de la colaboración constante.
La entidad, que promueve el compromiso de las empresas en la mejora de la sociedad, ha recordado que las empresas “no se diferencian por un producto, pero sí lo hacen a través de la conexión que logran obtener con la sociedad y en último caso por sus valores únicos”. En ese sentido la directora general de la Fundación SERES, Ana Sainz, ha instado a la existencia de unas empresas “más humanas”. A su juicio, las compañías deberán centrarse en sus consumidores, en los inversores y en la sostenibilidad.
Recuerdan que la cuarta revolución industrial hará posible que se construya un futuro en el que nadie se quede atrás. “Las organizaciones pueden contribuir significativamente al desarrollo económico, social o medioambiental, ya sea a través de sus operaciones o de la creación de cadenas de valor”, indican. Desde la entidad señalan que las empresas tienen capacidad para “llevar a cabo un reto ambicioso como es el de generar soluciones eficientes, eficaces y escalables al tiempo que sostenibles”.
Pese a los efectos de la Covid-19, desde SERES opinan que las compañías sabrán “reaccionar rápido”, de hecho, apuntan que muchas ya lo han hecho y han asumido “un rol de líderes responsables, que es tan necesario en este tipo de situaciones”.
La entidad ha promovido una iniciativa denominada #SERESResponsables para apoyar tanto a las empresas y ONG en la situación que están viviendo. La iniciativa se ocupa de mostrar proyectos que están en marcha y que suponen una contribución a resolver problemas concretos, así como detectar nuevas necesidades que pueden cubrirse.
En cuanto a los desafíos de este año, apuntan que “no serán pocos” y que estarán relacionados con las personas. No obstante, afirman que ” la tecnología que ha permitido nuevos modelos ágiles de trabajo pero que ha evidenciado también brechas de pobreza, el papel de la empresa en esta reconstrucción capaz de adaptarse a nuevas circunstancias, los líderes responsables, más necesarios que nunca, capaces de evitar inercias y marcar el paso con valentía”.